Nueva York, 14 de julio de 2025 – Un estudio reciente, publicado en la prestigiosa revista *Journal of Adolescent Health*, ha identificado una posible correlación entre la relación que una adolescente mantiene con su abuelo paterno y el momento en que experimenta el inicio de la pubertad. La investigación, que surge en un contexto de creciente preocupación por la disminución del promedio de edad en la pubertad femenina, ofrece una nueva perspectiva sobre este fenómeno.
El estudio, llevado a cabo por el Dr. Elias Vance de la Universidad de Columbia, analizó los datos de más de 500 adolescentes entre las edades de 10 y 16 años. Los investigadores observaron que aquellas jóvenes con una relación cercana y frecuente con su abuelo paterno tendían a comenzar la pubertad ligeramente más tarde en comparación con las que tenían menos contacto o una relación distante. La diferencia, aunque sutil, se situó alrededor de 6 a 8 meses, según los resultados.
“Esta investigación se realiza en un momento crucial, dado el aumento de preocupaciones sobre la aceleración de la pubertad en las niñas”, explicó el Dr. Vance en una conferencia de prensa celebrada hoy. “Si bien la causa exacta de esta correlación aún no se ha determinado, creemos que la dinámica familiar juega un papel importante en el desarrollo hormonal y el ritmo de la pubertad.”
Las teorías que explora el estudio se basan en la hipótesis de que la presencia de un abuelo paterno puede estar asociada con un ambiente familiar más estable, con normas de género menos influenciadas por la cultura popular o por presiones externas. También se sugiere que la relación podría influir en los niveles de estrés en la adolescente, lo que a su vez podría afectar al sistema endocrino.
Es importante destacar que el estudio no establece una relación causal, sino que identifica una correlación significativa. Se necesitan investigaciones adicionales para comprender completamente los mecanismos subyacentes a esta relación y para determinar si factores como la genética, el entorno socioeconómico o la dieta también desempeñan un papel.
El equipo de investigación ya está planeando un estudio de seguimiento a largo plazo para evaluar si esta correlación se mantiene a medida que las adolescentes maduran y para investigar si la relación con el abuelo paterno podría ser modificada por otros factores. Los hallazgos han generado un debate en la comunidad científica y han propiciado una mayor atención a la importancia de las dinámicas familiares en el desarrollo adolescente.