Los Angeles, California – El ambiente en el Dodger Stadium fue de contrastes el viernes por la tarde, una mezcla palpable de risa y lágrimas, todo en honor a la icónica carrera de José Reyes, quien finalmente colgó las botas tras una larga y, a menudo, complicada trayectoria en las Grandes Ligas. El momento culminante llegó al final del partido, durante el protocolo de despedida, cuando David Wright, ex compañero de Reyes en los Mets de Nueva York, ofreció palabras conmovedoras sobre su “diamond brother”.
“Es un día que te toca sentir”, declaró Wright en una conferencia de prensa posterior al juego. “José es más que un compañero de equipo, es un amigo, un hermano. Hemos compartido momentos increíbles, tanto buenos como malos, y siempre lo he apoyado. No puedo negar que hubo momentos difíciles, especialmente en Nueva York, pero siempre lo vi como un jugador talentoso y un tipo increíble.”
Reyes, quien jugó 14 temporadas en las Grandes Ligas, incluyendo 8 con los Mets (2009-2016) y 6 con los Dodgers (2017-2023), se despidió de la MLB después de un temporada regular con los Dodgers. A lo largo de su carrera, Reyes ha sido reconocido por su talento ofensivo, su dedicación y su espíritu competitivo, aunque también ha sido objeto de controversias y ha luchado contra lesiones y problemas fuera del campo.
“David es una pieza clave en esto”, señaló el manager de los Dodgers, Justin Turner. “Su presencia al final de la ceremonia, compartiendo estos recuerdos con José, es un testimonio de la lealtad y el respeto que existe entre los jugadores de este deporte. Es una imagen que quedará grabada en la memoria de todos los que lo conocemos.”
Wright, quien se unió a los Mets en 2007 y jugó con Reyes durante la mayor parte de su tiempo en Nueva York, enfatizó la importancia del apoyo mutuo en el mundo del béisbol. “En el béisbol, a veces pasas por momentos difíciles, momentos que te ponen a prueba”, admitió. “Pero contar con amigos como José, que siempre están ahí para apoyarte, hace que todo sea más llevadero. Y eso es lo que realmente importa.”
La despedida de Reyes fue celebrada con un discurso de agradecimiento por parte del jugador, seguido por felicitaciones de compañeros de equipo, ex compañeros y figuras del mundo del béisbol. El estadio se llenó de aplausos mientras Reyes recibía las últimas muestras de aprecio por su contribución al juego. Mientras el sol se ponía sobre el Dodger Stadium, un final emotivo para una carrera que, a pesar de sus altibajos, quedará para siempre en el corazón de los aficionados de las Grandes Ligas.