Justo a quince kilómetros de *La Americana* – el barrio mexicano que Time Out ha proclamado recientemente “el más cool del mundo” – se encuentra un escenario radicalmente diferente: Lomas del Mirador, conocido por los locales como “el Chernobyl” de México. Este enclave, una zona de ruinas industriales y edificios abandonados, ofrece una imagen inquietante y, a su vez, fascinante, que contrasta fuertemente con la vibrante vida que se vive a pocos pasos.
A primera vista, Lomas del Mirador no es radiactivo, pero la sensación de desolación es palpable. Se trata de interminables filas de bloques de apartamentos en ruinas, cubiertos de grafitis y tragados por la maleza. Es un vasto cementerio de bloques de hormigón donde el silencio solo es interrumpido por la actividad del crimen organizado, que ha ocupado las casas vacías como guaridas y, en algunos casos, como lugares de enterramiento clandestino.
Pero la historia detrás de “el Chernobyl” mexicano no es de un desastre natural, sino producto de una decisión política. Los bloques de Lomas del Mirador fueron construidos en la década de 1970 como parte de un programa de vivienda masiva, pero su construcción fue interrumpida abruptamente debido a una fuerte oposición social y a la falta de recursos. La falta de mantenimiento y el abandono de la zona dieron lugar al estado de deterioro actual.
La zona se convirtió en un refugio para bandas criminales y, por tanto, un lugar de peligro y misterio. El silencio y la desolación que se respiran en Lomas del Mirador, ahora, son un testimonio de una promesa incumplida y de las consecuencias de la mala planificación urbana.
[Imagen 1: Foto de los bloques de apartamentos abandonados de Lomas del Mirador, mostrando la ruina y el abandono.]
[Imagen 2: Otro ángulo de los edificios abandonados, tal vez enfocando el graffiti o la maleza que los invade.]
[Enlace a la fuente original: https://www.mexicodecoded.com/p/the-mexican-chernobyl]
Fuente: https://www.mexicodecoded.com/p/the-mexican-chernobyl