Hace algunos años, si eras un entrenador de fútbol y te quejabas de la importancia de los saques de esquina y las faltas, te consideraban un “dinosaurio” del fútbol. La idea era que eran un gasto de tiempo, que no valían la pena la atención y que los jugadores modernos deberían centrar su energía en otras áreas del juego. Pues bien, parece que las cosas han cambiado significativamente.
El artículo de la BBC Sport (publicado el 29 de octubre de 2025) examina cómo la estrategia de los saques de esquina y las faltas ha evolucionado, y por qué los entrenadores ya no se quejan tanto de ellas.
Más que un simple centro: la evolución de los saques de esquina
Antiguamente, el saque de esquina se veía como un simple intento de centrar el balón al área. Se esperaba que un jugador, normalmente el centrocampista que ejecutaba el saque, lanzara el balón con toda fuerza, sin mucho pensamiento estratégico. La efectividad de estos saques era, en general, baja.
Pero el fútbol ha evolucionado. Los entrenadores ahora entienden que el saque de esquina puede ser mucho más que un simple centro. Se han desarrollado estrategias sofisticadas, incluyendo:
* Movimientos de los jugadores: Los entrenadores asignan a jugadores específicos para colocarse en posiciones clave alrededor del área, esperando que se encuentren libres para rematar.
* Variedad de centros: Ya no se trata solo de centros largos y directos. Ahora se utilizan centros cortos, centros en el segundo palo, centros con efecto, etc., para crear confusión en la defensa.
* Presión después del saque: Una táctica clave es presionar inmediatamente después del saque, para forzar al defensor a cometer un error o para desorganizar la defensa.
La falta: un arma táctica también
La falta, que antes era vista como un problema, también se ha convertido en una herramienta táctica. Los entrenadores están trabajando para elegir a los mejores ejecutores de faltas, aquellos con la habilidad y la precisión para colocar el balón en un lugar difícil para el portero. Además, se analizan las características de la defensa para elegir la falta que más daño pueda causar.
¿Por qué los entrenadores ya no se quejan?
La razón principal es que la efectividad de los saques de esquina y las faltas ha aumentado considerablemente. El fútbol moderno es más táctico, más estratégico y más analítico. La capacidad de aprovechar al máximo estas situaciones se ha convertido en un factor clave para el éxito.
Además, los entrenadores ahora tienen acceso a datos y análisis que les permiten comprender mejor cómo ejecutar y defender estas situaciones. Esto ha llevado a una mayor profesionalización y a una mejor utilización de estos recursos.
En resumen, la percepción de los saques de esquina y las faltas ha cambiado radicalmente. Ya no son vistos como una pérdida de tiempo, sino como una herramienta táctica importante que puede marcar la diferencia entre la victoria y la derrota. El fútbol se ha vuelto más inteligente y las oportunidades en las zonas de falta han recuperado su valor.
Fuente: https://www.bbc.com/sport/football/articles/cx2p90x89pwo?at_medium=RSS&at_campaign=rss

