El choque entre Inglaterra y Australia en el Estadio Rose Bowl terminó con una humillación para la selección inglesa, con un equipo australiano, compuesto en gran parte por jugadores de reserva y jóvenes talentos, que dominó el partido de principio a fin.
Rose Bowl, 6 de diciembre de 2025 – Una Inglaterra que parecía inamovible en los últimos meses sufrió una derrota contundente frente a un Australia con un equipo de reserva que demostró una calidad y un entreno que la selección inglesa no pudieron igualar. La victoria, terminada con una diferencia de 147 carreras, ha provocado un debate acalorado sobre el rendimiento de la “Azul” y, en particular, sobre la estrategia de selección de su capitán, Ben Stokes.
El partido se vio marcado desde el principio por una actuación excepcional del bateador joven, Finn Williams, quien anotó un brillante 132 carreras antes de ser sustituido por estrategia por el entrenador. Williams demostró una agresividad y un control del cricket que la mayoría de los jugadores de la plantilla inglesa no pudieron replicar. Su estilo de juego, con un enfoque en la potencia y la precisión, desestabilizó por completo al bowling de Inglaterra, que parecía incapaz de encontrar una solución efectiva.
El bowling de Inglaterra, liderado por Chris Woakes, mostró fallos notables. El ritmo fue inconsistente y las variaciones en la línea no fueron aprovechadas, permitiendo a Williams y a otros bateadores australianos construir un total formidable. Además, los lanzamientos de cambios no fueron efectivos y la presión en el campo no logró detener el ataque australiano.
“Es una decepción enorme”, admitió Ben Stokes en la rueda de prensa posterior al partido. “Hemos dejado escapar demasiado trabajo en el campo y nuestro ataque de bowling no ha estado a la altura de las circunstancias. La actuación de Williams fue simplemente excepcional y nos superó”.
El análisis del renombrado comentarista cricket, Vaughan, ha sido particularmente contundente. “Esto no es un equipo. Stokes está tomando decisiones equivocadas. Está utilizando jugadores que no están en su mejor momento y está ignorando el talento que tiene en la reserva. Australia ha mostrado una clara ventaja en la calidad del jugador, y Stokes necesita urgentemente replantear su estrategia para que Inglaterra pueda competir a nivel mundial”.
La derrota pone de manifiesto la necesidad de que Inglaterra revise sus opciones y considere más seriamente el talento que posee en su bancada, algo que ahora, según los expertos, ha sido una de las claves del éxito australiano. El futuro de la selección inglesa pende de un hilo, y la forma en que Stokes gestione su equipo en los próximos partidos será crucial para su viabilidad a largo plazo.
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Fuente: https://www.bbc.com/sport/cricket/articles/cqlk0q5n0r4o?at_medium=RSS&at_campaign=rss