FIFA Acusada de Incumplir Sus Propias Normas Tras la Concesión del Premio a Trump

ZURICH, Suiza – La Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) se enfrenta a una creciente controversia tras ser acusada de violar sus propias regulaciones en la concesión del premio al ex presidente estadounidense Donald Trump como “Jugador de la Copa Mundial de Qatar 2022”. La acusación, levantada por un grupo de abogados deportivos y representantes de organizaciones de defensa de derechos humanos, argumenta que la decisión de FIFA, tomada por el entonces presidente Gianni Infantino, carece de justificación y contradice abiertamente los criterios establecidos por la organización para la entrega del prestigioso galardón.

Según los documentos legales, la entrega del premio a Trump, motivada en un comunicado oficial por “su liderazgo y apoyo al fútbol”, ignora explícitamente los requisitos de FIFA que obligan a la selección al ganador a haber participado activamente en la competición. Trump, que no jugó ni representó a ningún equipo en el Mundial de Qatar 2022, se benefició del premio, generando indignación y críticas generalizadas a nivel mundial.

“La decisión de FIFA es un claro ejemplo de falta de integridad y de un desprecio absoluto por los principios que la organización afirma defender”, declaró Liam Murphy, uno de los abogados que lidera la demanda. “La regla fundamental de que el premio solo se otorga a jugadores que hayan participado en el Mundial ha sido ignorada, creando un precedente peligroso y abriendo la puerta a futuras irregularidades”.

FIFA, a través de un comunicado oficial emitido el lunes, defendió su decisión, argumentando que la entrega del premio a Trump fue un “acto de reconocimiento por su influencia y apoyo a la FIFA en los años anteriores”, y que no se trataba de una selección basada en criterios deportivos. El comunicado también señalaba que la decisión fue tomada en un contexto de “difícil situación geopolítica” y que la FIFA buscaba “reafirmar su compromiso con el diálogo y la diplomacia”.

Sin embargo, la defensa no ha logrado mitigar la creciente presión. La organización ha recibido llamadas de diversas asociaciones futbolísticas y de países, instándoles a condenar la decisión y a exigir una revisión de las normas de entrega de premios por parte de FIFA.

La controversia ha generado un debate en el seno de la organización sobre la transparencia y la ética en la toma de decisiones, así como sobre el papel de la FIFA en la esfera política internacional. Se espera que el Comité de Ética de FIFA, que investiga la acusación, presente sus conclusiones en las próximas semanas, lo que podría tener implicaciones significativas para la reputación de la organización y para la confianza depositada por los aficionados y los stakeholders del fútbol mundial.

La investigación está siendo seguida de cerca por los medios de comunicación deportivos y por la opinión pública, que consideran que la situación representa una seria amenaza para la integridad del deporte rey.

Fuente: https://www.bbc.com/sport/football/articles/c04vq6ldv6lo?at_medium=RSS&at_campaign=rss