Durante décadas, la política de seguridad de México ha sido simplificada a menudo en una única narrativa: un estado incapaz de controlar la delincuencia organizada. Sin embargo, esta visión superficial ignora la complejidad de una lucha que ha durado más de dos décadas, caracterizada por una constante evolución de estrategias y, con ella, un desenlace ineludiblemente ambiguo. Analizamos la “Guerra de 25 Años” contra los cárteles, explorando las diferentes estrategias empleadas, sus fallos y las consecuencias de una confrontación que ha moldeado profundamente a la sociedad mexicana.
Más Allá del Fracaso: Un Contexto Histórico
La imagen predominante de México como un país incapaz de contener el poder de los cárteles, arraigada en la opinión pública y en la cobertura mediática, es comprensible. La violencia extrema, la corrupción endémica y la sensación de impunidad han alimentado esta percepción. No obstante, la realidad es mucho más matizada. La estrategia de seguridad mexicana ha sido una danza constante de respuestas, muchas veces mal pensadas o implementadas de manera ineficaz.
Fases de la Lucha: Un Cambio de Estrategias
La “Guerra de 25 Años” no fue un combate uniforme. Se puede dividir en varias fases, cada una marcada por un enfoque particular:
* Década de 2000: Operaciones Múltiples y Respuesta Táctica: Inicialmente, el gobierno mexicano, bajo la administración de Vicente Fox, recurrió a operaciones militares concentradas, buscando desmantelar las estructuras de los cárteles de la droga. Estas acciones, aunque lograron algunos éxitos, no abordaron las raíces del problema: la demanda de drogas en Estados Unidos, la corrupción en las instituciones y la falta de inversión en alternativas económicas para las comunidades marginadas.
* La Era de Felipe Calderón (2006-2012): La Guerra al Cártel como Prioridad Nacional: Bajo el gobierno de Felipe Calderón, la guerra contra los cárteles se convirtió en la principal prioridad. Se desplegó el ejército en todo el país, se otorgaron facultades sin precedentes a las fuerzas armadas y se intensificó la persecución de líderes cárteles. Esta estrategia, aunque inicialmente pareció ganar terreno, terminó exacerbando la violencia, llevando a una escalada en la confrontación entre el Estado y los cárteles, y consolidando la influencia de organizaciones criminales en todo el territorio nacional.
* La Administración de Enrique Peña Nieto (2012-2018): Un Enfoque en la Seguridad Pública y la Colaboración: La administración de Peña Nieto intentó combinar estrategias de combate directo con medidas de prevención, como programas sociales y la creación de la Comisión Nacional de Seguridad Pública (CNS). Sin embargo, la corrupción, la ineficacia de las instituciones y la falta de una política integral de seguridad pública limitaron su impacto. La guerra de túneles y la infiltración de los cárteles en instituciones estatales se convirtieron en una realidad palpable.
* Los Últimos Años de la Administración Trump (2017-2021): El Peso de la Demanda Estadounidense: La administración de Donald Trump introdujo un enfoque más duro, exigiendo a México tomar medidas más agresivas para combatir el tráfico de drogas y presionando para que se cerraran las fronteras. Si bien este enfoque generó cierta presión sobre los cárteles, no abordó las causas profundas de la violencia.
El Presente y el Futuro: Una Nueva Perspectiva
Hoy, con la administración de Andrés Manuel López Obrador, se ha adoptado una estrategia diferente, basada en la “Cuarta Transformación” y priorizando la seguridad humana sobre la seguridad militar. Se han enfocado en la prevención del delito, el fortalecimiento de las instituciones civiles y la atención a las víctimas. Si bien esta nueva perspectiva muestra algunos signos de éxito en algunas regiones, la complejidad del problema de la delincuencia organizada sigue siendo un desafío formidable.
Conclusión:
La “Guerra de 25 Años” contra los cárteles de México es una historia de fracasos y éxitos parciales, de estrategias equivocadas y una resistencia implacable por parte de organizaciones criminales. No es una historia de fracaso total, sino de una lucha constante, un reflejo de la profunda complejidad de la sociedad mexicana y de la necesidad de abordar las causas fundamentales de la violencia, más que simplemente enfrentarla con fuerza militar. El futuro de México depende de encontrar una solución integral que combine la seguridad con el desarrollo económico, la justicia social y la construcción de instituciones sólidas.
Fuente: https://www.mexicodecoded.com/p/mexico-has-tried-everything-to-stop

