México’s security policy is often flattened into a single story of failure: a state that, for decades, has been unable to control organized crime. That framing misses the real story. Durante más de dos décadas, México ha librado una batalla de desgaste contra las organizaciones criminales, una lucha marcada por la innovación, la adaptación y, en última instancia, la frustración. Más allá de la narrativa simplista de un gobierno ineficaz, se encuentra una historia compleja, llena de estrategias erróneas, alianzas políticas frágiles y, finalmente, un reconocimiento gradual de la magnitud del desafío.
El Primer Capítulo: La Respuesta de Seguridad Tradicional (1990s – Early 2000s)
La guerra contra el narcotráfico comenzó en los años 90, impulsada principalmente por la creciente producción y distribución de cocaína en Colombia. La estrategia inicial fue la de la represión. El gobierno, bajo el presidente Ernesto Zedillo, invirtió fuertemente en fuerzas policiales y militares, enfocándose en la captura de capos y en la interdicción de cultivos de amapola. Sin embargo, esta aproximación, considerada como “mano dura”, resultó ser superficial. Los cárteles, liderados por el Cártel de Sinaloa, se adaptaron rápidamente, utilizando redes de contrabando más sofisticadas y reclutando nuevos líderes. El enfoque en la captura de los líderes no abordó las raíces del problema: la corrupción, la falta de oportunidades económicas y la debilidad institucional.
El Auge de los “Bajarrocas” y la Estrategia de “Tapadura” (2000s)
A principios de la década del 2000, el Cártel de los Sinaloa, liderado por Joaquín “El Chapo” Guzmán, perfeccionó su modelo de negocio. Adoptaron la estrategia de “tapadura” – hacerse pasar por empresas legítimas para lavar dinero y financiar operaciones ilícitas. También aumentaron drásticamente su presencia en ciudades, controlando territorios y estableciendo negocios aparentemente legales. Simultáneamente, el gobierno, bajo la administración de Vicente Fox, adoptó una política de “desjudicialización”, un intento fallido de desviar casos criminales a tribunales estatales, con la esperanza de reducir la carga sobre el sistema judicial federal. Esta estrategia, lejos de debilitar a los cárteles, les brindó un espacio de operación y facilitó la impunidad.
La Era de la “Seguridad Pública” y el Proceso de Reconstrucción del Estado (2006-2012)
La administración de Felipe Calderón, en 2006, marcó un cambio radical con la implementación de la “Seguridad Pública,” una estrategia que aumentaba drásticamente el despliegue de fuerzas federales y estatales en todo el país. Esta estrategia, impulsada por el uso de tácticas militares para combatir al crimen organizado, intensificó aún más la violencia y el conflicto. La falta de una reforma profunda del sistema de justicia, la corrupción endémica y la incapacidad para abordar las causas subyacentes del crimen contribuyeron al fracaso de esta estrategia. El número de muertos aumentó exponencialmente, y la violencia se extendió a todo el país.
Innovación Criminal y la Crisis Institucional (2012-2025)
A partir de 2012, los cárteles innovaron, utilizando tácticas de guerra asimétrica, como el sicariato, el control de territorios y la infiltración en instituciones estatales. La corrupción, a nivel local y federal, se convirtió en un factor determinante en la estrategia de los cárteles, permitiéndoles operar con impunidad. El gobierno, bajo diferentes administraciones, se vio incapaz de implementar reformas estructurales que abordaran las causas profundas del problema o de construir instituciones sólidas y transparentes. Las políticas cambiantes, la falta de consenso político y la fragmentación institucional perpetuaron el ciclo de violencia y el control criminal. A pesar de inversiones significativas en seguridad pública, la guerra contra el narcotráfico continuó siendo un conflicto de desgaste, con resultados limitados y una creciente sensación de desesperación. La lucha, en esencia, se ha convertido en una demostración de la dificultad de abordar un problema profundamente arraigado en la sociedad mexicana.
Fuente: https://www.mexicodecoded.com/p/mexico-has-tried-everything-to-stop

