Por Liam Cooper, BBC Sport
Londres, 21 de Diciembre de 2025 – La serie Ashes 2025-2026 se ha cerrado con un sabor amargo para Inglaterra. Tras un inicio prometedor, la invicta selección británica ha sido humillada por Australia, no solo en el campo de juego, sino también en la moral y en la percepción pública. La derrota final, y la forma en que se produjo, revelan una combinación devastadora de factores que van mucho más allá del simple rendimiento deportivo.
El inicio de la serie parecía presagiar una épica batalla, con Inglaterra mostrando un espíritu combativo y una racha de victorias que alimentaba la esperanza de un triunfo. Sin embargo, la forma en que se desmoronó la selección fue tan abrupta como desmoralizadora.
Un Ambiente de Desconcentración: La primera fase de la serie, jugada en el sur de Inglaterra, estuvo marcada por un ambiente que parecía más centrado en el disfrute y la celebración que en la concentración necesaria para un torneo de alta competición. Los informes de la prensa, y de algunos testigos, apuntan a una atmósfera de excesos, con noches de “booze” (alcohol) en la playa, fiestas privadas y, en general, una desconexión del rigor profesional.
“El ambiente se volvió demasiado relajado”, comentó un miembro del equipo, que pidió permanecer anónimo. “Hubo una sensación de que la serie se estaba convirtiendo en un evento social más que en un desafío deportivo. La presión se disipó, y eso fue devastador para la mentalidad del equipo”.
Más allá del Campo: La desconcentración no fue el único problema. Problemas de disciplina, decisiones tácticas cuestionables y una falta de liderazgo cohesionador contribuyeron a la debacle. La gestión de las rotaciones de bateadores, en particular, fue objeto de críticas feroces, con demasiados jugadores, de repente, dejando el equipo en una situación desesperada.
El calor extremo, que golpeó particularmente la fase final de la serie, también jugó un papel, desorientando al equipo y exponiendo las debilidades tácticas. La falta de preparación para este factor climático fue ampliamente criticada.
El Dominio Australiano: Mientras tanto, Australia demostró ser un equipo implacable, bien liderado y con una mentalidad gélida y centrada en el objetivo. La tenacidad del equipo australiano, su disciplina y su capacidad para adaptarse a las condiciones adversas fueron los ingredientes que les permitieron ganar no solo los partidos, sino también la serie.
Un Futuro Incierto: La derrota en la Ashes ha provocado un profundo debate en Inglaterra sobre el estado del cricket, la necesidad de una mayor disciplina y la importancia de mantener la concentración incluso en los momentos más difíciles. El futuro de algunos jugadores ha sido puesto en duda, y la Federación de Cricket Inglesa (ECB) se enfrenta a una tarea monumental para reconstruir la confianza y el espíritu competitivo de la selección. La pregunta que queda es: ¿Podrá Inglaterra volver a dominar la Ashes, o la lección de Booze, Beach, and Beaten se ha grabado a fuego en la historia del cricket inglés?
Palabras Clave: Ashes, Inglaterra, Australia, Cricket, Serie, Desconcentración, Booze, Beach, Beaten, ECB.
Fuente: https://www.bbc.com/sport/cricket/articles/c79xynw7e39o?at_medium=RSS&at_campaign=rss

