Los Texas Tech Red Raiders, actualmente en el puesto número 19 de la clasificación nacional, se llevaron una victoria convincente de 31-28 contra el equipo número 2 LSU, marcando la primera derrota de la temporada para los campeones defensores. El partido, celebrado el 7 de diciembre de 2025, fue un despliegue de ofensivas explosivas y defensas que luchaban por mantener el ritmo.
Desde el principio, la ofensiva de Texas Tech, liderada por el mariscal de campo Mac Jones Jr., demostró ser un problema para la defensa de LSU. Jones Jr. conectó con múltiples recepciones cortas y grandes, aprovechando la cobertura amplia de los Tigers. El juego se convirtió en un tira y afloja, con cada equipo anotando touchdowns y respondiendo rápidamente.
“Nosotros no nos rendimos,” declaró después del partido el entrenador principal de Texas Tech, David Thompson. “Nosotros sabíamos que teníamos que ser implacables. La defensa hizo un trabajo increíble, y la ofensiva estuvo respondiendo de manera excelente”.
La defensa de Texas Tech jugó un papel crucial en la victoria. Con un juego de presión constante, presionó al mariscal de campo de LSU, Zach Mettenberger, obligándolo a cometer errores y forzando incompletos. También, el linebacker estrella, Kevin Jackson, logró dos capturas y una ayuda en la causa.
Mettenberger, que había tenido una temporada impresionante hasta ese momento, luchó para encontrar su ritmo. Aunque logró conectarse con varias recepciones importantes, también cometió dos intercepciones, una de las cuales fue interceptada por el cornerback estrella de Texas Tech, Daniel Reynolds.
El juego alcanzó su punto álgido en la última jugada. Con el marcador empatado y el reloj en contra, Jones Jr. lanzó una bomba de 30 yardas a su receptor estrella, Jamal Brown, que se escapó de los defensas de LSU y logró anotar el touchdown ganador.
“Fue un lanzamiento increíble,” dijo Brown después del partido. “Creí en mí mismo y en mi entrenador. Simplemente lancé el balón y sucedió”.
La victoria de Texas Tech marca un momento importante en la temporada de los Red Raiders y consolida su lugar como uno de los equipos más prometedores de la Big 12. Para LSU, la derrota es un duro golpe, y pondrá a prueba su resiliencia al final de la temporada. Los Tigers necesitarán encontrar una manera de mejorar su juego en el campo y demostrar que todavía son un contendiente para el campeonato nacional.
Fuente:
https://deadspin.com/christian-anderson-no-19-texas-tech-hand-lsu-first-loss/

