Publicado por: Carlos Belda
¿Alguna vez te has sentido atrapado en tus propios pensamientos?
Puede que en algún momento de tu vida hayas sentido un vacío, una falta de sentido o que no puedes dejar de darle vueltas a la cabeza. Tal vez recuerdes haber tomado decisiones impulsivas para evitar el malestar: comer una tableta entera de chocolate, pasar horas viendo series, responder de forma airada o aceptar propuestas contrarias a tus verdaderos deseos.
Estas son señales típicas de inflexibilidad psicológica.
Qué es la flexibilidad psicológica
La flexibilidad psicológica se define como:
“La capacidad de sentir y pensar con apertura mental, asistir voluntariamente a la experiencia del momento presente y avanzar en direcciones que son importantes para nosotros, desarrollando hábitos que nos permiten vivir en coherencia con nuestros valores y aspiraciones.”
(Hayes, S.C., 2020)
En pocas palabras, se trata de no evitar lo que nos resulta doloroso, sino acercarnos a ello para poder vivir con sentido y propósito. Esta idea está respaldada por más de 40 años de investigación en psicología y mindfulness, especialmente en enfoques como la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT).
Las 6 habilidades clave para desarrollar flexibilidad psicológica
- Defusión:
Aprender a no creer ciegamente todo lo que pensamos. Nuestros pensamientos no siempre son verdades absolutas.
Necesidad esencial: coherencia y comprensión. - Perspectiva del yo:
Diferenciar entre quién eres y lo que experimentas. No somos solo nuestra imagen mental.
Necesidad esencial: pertenencia y conexión. - Aceptación:
Estar con nuestras emociones, pensamientos y sensaciones, incluso cuando son desagradables, sin evitarlas.
Necesidad esencial: sentir plenamente, no solo lo agradable. - Presencia:
Ampliar la conciencia de lo que ocurre en el aquí y ahora, en lugar de quedarnos atrapados en el pasado o futuro.
Necesidad esencial: orientación. - Valores:
Elegir valores propios y no solo seguir los impuestos por la sociedad o el entorno.
Necesidad esencial: sentido y significado. - Acción:
Actuar en función de lo que valoramos, incluso cuando es difícil, en vez de solo evitar el malestar.
Necesidad esencial: competencia y crecimiento.
Por qué deberías cultivarla
Más de mil estudios han demostrado que estas habilidades ayudan a explicar por qué algunas personas prosperan después de las dificultades y otras no.
La rigidez psicológica está asociada con ansiedad, depresión, abuso de sustancias, estrés postraumático, trastornos alimentarios y otros problemas emocionales.
Cultivar la flexibilidad psicológica es tan importante para la mente como el ejercicio físico y la buena alimentación lo son para el cuerpo.
Ejercicio práctico para comenzar
Prueba esto ahora mismo:
- Ponte de pie y empieza a caminar por la habitación.
- Mientras caminas, repite siete veces: “No puedo caminar por la habitación”.
- Observa cómo tu cuerpo sigue moviéndose a pesar de lo que dice tu mente.
Este sencillo ejercicio muestra que lo que pensamos no siempre determina lo que hacemos. Se trata de una herramienta de defusión psicológica y mindfulness.
Referencia
Hayes, S.C. (2020). Una mente liberada: la guía esencial de la terapia de aceptación y compromiso (ACT). Barcelona: Paidós.
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