Fecha de Publicación: 22 de agosto de 2025
Durante un discurso pronunciado desde la Casa Blanca, el expresidente Donald Trump sugirió que el Centro Kennedy, un emblemático teatro de Washington D.C., debería ser renombrado en honor a figuras conservadoras. La propuesta, que surgió durante una conversación sobre la importancia de preservar la “cultura americana”, generó una oleada de reacciones, desde críticas mordaces hasta llamados a defender el legado del Centro Kennedy.
Según fuentes cercanas al expresidente, Trump argumentó que el centro, originalmente fundado en 1963 en memoria del presidente John F. Kennedy, había perdido su “verdadero espíritu” y que su nombre debía ser cambiado para reflejar “valores americanos tradicionales”. No especificó a qué figuras podría homenajear, pero sugirió que podrían ser “héroes del pasado” que “siempre han defendido la libertad y el patriotismo”.
El discurso, que se produjo en un contexto de creciente polarización política en Estados Unidos, ha sido interpretado por muchos como un intento de reafirmar su base de votantes y de desafiar al actual gobierno. El Centro Kennedy, conocido por sus producciones de Broadway y sus programas de educación artística, ha sido un centro neurálgico de la cultura americana durante décadas, y su renombre ha desatado un intenso debate.
La reacción inmediata fue de indignación y rechazo por parte de figuras del mundo del espectáculo, políticos demócratas y activistas. Muchos expresaron su preocupación por la potencial influencia de la propuesta en la libertad artística y la diversidad. El Comité Ejecutivo del Centro Kennedy emitió un comunicado en el que se condenaba la sugerencia, calificándola de “despreciable y ofensiva”, y reafirmaba su compromiso con la misión del centro como un espacio inclusivo y abierto a todas las formas de expresión artística.
“El Centro Kennedy ha sido un faro de creatividad y cultura durante más de seis décadas,” declararon. “Su nombre, en honor a un presidente que se esforzó por el progreso y la unidad, es un símbolo de nuestra nación. El expresidente Trump intenta erosionar este legado y nosotros no permitiremos que lo haga.”
El debate continúa y se espera que la administración actual, bajo la presidencia de la Sra. Elena Ramirez, tome una postura oficial sobre la propuesta. Mientras tanto, el futuro del Centro Kennedy, y su nombre, permanecen inciertos.

