Ciudad de México, 13 de Septiembre de 2025 – Una exhaustiva revisión de estudios académicos durante más de dos décadas arroja una imagen mucho más compleja y matizada de la delincuencia organizada en México, desafiando las narrativas simplistas que predominan en los medios de comunicación. Según el profesor Omar García Ponce, Asociado Profesor de Ciencia Política e Relaciones Internacionales de la Universidad George Washington, quien se pronuncia en el podcast “Mexico Decoded”, la relación entre los cárteles y el Estado, así como la efectividad de las estrategias de represión, son elementos cruciales para comprender la realidad.
El análisis, que se ha centrado en la acumulación de datos y estudios de diversas instituciones académicas, revela que la colaboración entre los grupos criminales y ciertas facciones dentro de las instituciones gubernamentales, especialmente a nivel local, no es una anomalía, sino una característica intrínseca de la dinámica. Esta cooperación, según García Ponce, a menudo se produce para “cortar los beneficios” del crimen, pero paradójicamente, no siempre conduce a una reducción en la violencia.
Una de las conclusiones más destacadas del estudio es que las operaciones policiales y judiciales, en muchos casos, han exacerbado la situación. Las “crackdowns” agresivas, diseñadas para desmantelar los cárteles, han demostrado ser contraproducentes, fomentando la fragmentación del crimen y, por ende, impulsando a nuevos grupos a competir por el control del territorio. La incapacidad de las autoridades para implementar estrategias de seguridad integrales, que aborden las causas subyacentes de la violencia y promuevan el desarrollo socioeconómico, continúa siendo un factor fundamental en el mantenimiento y la expansión de la delincuencia organizada.
“Es fundamental trascender la imagen del cártel como una organización monolítica y jerárquica,” explica García Ponce en el podcast. “La realidad es mucho más fluida y compleja, con múltiples actores, alianzas cambiantes y un entramado de intereses que se refuerzan mutuamente.”
El estudio también resalta la importancia de la gobernanza local y la corrupción como elementos clave en el problema. La falta de transparencia y rendición de cuentas en algunos gobiernos estatales ha facilitado la consolidación del poder por parte de los cárteles, mientras que la incapacidad de las instituciones para proteger a los testigos y denunciantes perpetúa el ciclo de impunidad.
En resumen, la investigación aporta una perspectiva más profunda y realista sobre la delincuencia organizada en México, desafiando la visión simplista de un conflicto puramente criminal y resaltando la necesidad de un enfoque integral que aborde las causas estructurales del problema y promueva una gobernanza más efectiva y transparente.
Fuente: https://www.mexicodecoded.com/p/organized-crime-research-mexico

